SISTEMA MONETARIO EN MÉXICO
Durante el siglo XX, principalmente de 1925 a 1968, los billetes de México no se producían aquí, los fabricaba la empresa American Bank Note Company en New York. Fue hasta 1969 que se fundó la Fábrica de billetes del Banco de México.
Desde entonces, la elaboración de billetes en la fábrica del Banco de México ha sido obra de técnicos y artistas que diseñan, graban y producen los billetes en su totalidad. El primer billetes producido en México fue de 10 pesos, su personaje es don Miguel Hidalgo y Costilla y se lanzó a la circulación a principios de los años setenta.
Una de las principales funciones del banco central es proveer billetes y monedas para que se puedan llevar a cabo las transacciones en forma eficiente y sin mayores contratiempos, esta es una parte integral del sistema monetario. Por eso, el banco central debe asegurarse que la cantidad de dinero en circulación corresponda con las necesidades de la economía.
En la práctica, el banco central no provee directamente los billetes y monedas a la economía, sino que los pone en circulación a través de los bancos comerciales. Estos billetes están respaldados por oro o algún equivalente, en las reservas del banco.
Para poder sacar el máximo provecho al derecho de la emisión de billetes, el costo de fabricarlos debe ser menor que el valor que tienen en el mercado. La ganancia que resulta de esta diferencia queda en las manos del banco emisor.
Antes de siglo XVI, hubo un periodo en que los bancos privados emitían dinero sin control y cedían créditos de manera excesiva. Los bancos públicos surgieron para controlar y evitar esta situación y son los antecedentes de los bancos centrales de hoy.
El primer banco central del mundo fue el Banco de Inglaterra, fundado en 1694. Se le confirió la exclusividad para emitir los medios de pago en su país y funcionaba como banquero y administrador de la deuda del gobierno.
El primer esfuerzo por consolidar un banco central en México estuvo a cargo de Agustín de Iturbide, en 1822. Sin embargo, las condiciones económicas y políticas del momento frustraron este intento. Más adelante, en 1830, se fundó el Banco de Avío, con el interés de establecer un banco de fomento, pero una vez más, su alcance y vida fueron cortos.
Durante el Porfiriato los bancos regionales podían emitir moneda que tenía aceptación local, pero sólo el Banco de Londres y México, y Banamex podían emitir moneda a nivel nacional. En 1884, Banamex estuvo muy cerca de convertirse en banco central, ya que fue a la vez emisor y prestatario del Gobierno Federal.
Durante la Revolución, diferentes grupos revolucionarios emitieron billetes para poder financiar su lucha. Por su parte, los bancos de emisión se vieron obligados por el gobierno de Victoriano Huerta (1914) a prestarle dinero para sostener su guerra contra los constitucionalistas. De este modo, los bancos de emisión se convirtieron en enemigos de la Revolución y se pronunciaron contra la pluralidad de emisores.
Al término de la lucha armada se estableció en la Constitución de 1917 que sólo el Gobierno Federal sería el encargado de emitir billetes. Finalmente, el 1 de septiembre de 1925 se fundó el Banco de México gracias a los esfuerzos y organización del Secretario de Hacienda, Alberto J. Pani, y al apoyo del Presidente de la República, Plutarco Elías Calles. A esta institución se le otorgó la facultad exclusiva de acuñar moneda metálica, y de emitir billetes, también se convirtió en asesor financiero y banquero del Gobierno Federal. Su primer director fue Manuel Gómez Morín, quien tuvo una importante participación en la elaboración de la Ley Constitutiva del Banco Único de Emisión.
De 1925 a 1931, el Banco de México enfrentó algunas dificultades porque sus billetes no eran aceptados por el público en general. Además, prevalecía la falta de cooperación de la banca comercial, a la que en ese momento no se le requirió adherirse al Banco de México.
En julio de 1931 se promulgó una Ley Monetaria que desmonetizó el oro en el país. La única opción que prevaleció para efectuar operaciones de gran denominación eran los billetes de Banco de México. Con la nueva Ley Monetaria de 1935, el Banco de México ya no pudo operar como banco comercial y se estableció que fuera regulador de la banca comercial. El billete de Banco de México se convirtió en la moneda de curso legal.
En 1993 se presentó la reforma constitucional mediante la cual se otorgó autonomía al Banco de México. Esta autonomía tiene como principal objetivo proteger a nuestra economía contra futuros brotes de inflación. Además, se estableció en esta reforma que “ninguna autoridad”
El Banco de México es nuestro banco central. Tiene la finalidad de proveer a la economía las monedas y billetes para que se realicen todas las transacciones y es la única institución que puede emitir moneda mexicana. También es responsable de mantener el poder adquisitivo del peso mexicano.
El Banco de México tiene la obligación de satisfacer diariamente la totalidad de la demanda de dinero y de respaldar los billetes y monedas que emite. Nuestro banco central también desempeña otras funciones entre las que están la regulación del sistema financiero y la del sistema de pagos. El Banco de México no es un banco comercial, por lo que ni las personas, ni las empresas pueden abrir una cuenta en este banco. Como sólo otorga créditos a otros bancos -la banca comercial- se dice que es un banco de bancos.
El Banco de México es autónomo. Esto quiere decir que el gobierno no puede intervenir directamente en cómo se maneja. Esta autonomía impide, por ejemplo, que alguna autoridad le ordene al Banco que le preste dinero. Esto es importante porque cuando el Banco de México no tenía autonomía, financiaba al gobierno poniendo más dinero en circulación. Aunque a corto plazo esto parecía aumentar el poder de compra, lo que resultaba era una inflación. Al intentar comprar más, los productos se encarecían y disminuía el poder de compra de nuestra moneda. Así, la autonomía del banco central puede verse como una protección contra futuros brotes de inflación.
Para fabricar los billetes mexicanos se usan principalmente tres tipos de impresión de seguridad: impresión offset simultánea en ambos lados; impresión Intaglio o calcográfica en uno o dos lados del billete, y tipográfica. Para los billetes impresos en polímero se realiza una impresión adicional llamada “recubrimiento”.
El proceso de impresión offset
Consiste en imprimir de manera indirecta y con poca presión las imágenes que se desea reproducir en el billete. Este proceso consta de tres elementos principales: una lámina, los dispositivos que aplican la tinta para imprimir y la mantilla, que será la que entrará en contacto directo con el papel moneda a imprimir.
El proceso de impresión offset se realiza simultáneamente en ambos lados de la hoja. Para lograr el colorido de la impresión en los billetes mexicanos, se utilizan al menos seis láminas. Las láminas transfieren la tinta a una mantilla que a su vez la transfiere al papel. La capa de tinta de los fondos es muy delgada, pero requiere de al menos una semana para secar. En los fondos se pueden imprimir conjuntos complejos de líneas muy finas, incluso con textos de altura menor a un milímetro, que requieren de la ayuda de una lente de aumento para ser observados.
El proceso de impresión Intaglio
Consiste en imprimir de manera directa, a una gran presión, temperatura, y con grandes cantidades de tinta, las imágenes que se desea reproducir en el papel moneda. El principal elemento de este proceso es la plancha, que tiene un grabado en bajo relieve que representa las áreas que se desean ilustrar en el billete.
Impresión Tipográfica
Se emplea para la impresión del folio que es el número que identifica a cada billete de manera única. Para lograr esto, los billetes se montan en la máquina de 60 a 120 foliadoras, que cambian automáticamente de número en cada vuelta de la máquina. Estas foliadoras reciben la tinta de un rodillo y la transfieren directamente al papel.
Impresión de recubrimiento
Es la última impresión que se realiza a los billetes impresos en polímero. Consiste en imprimir una capa de barniz incoloro en ambos lados de la hoja y tiene como finalidad darle mayor resistencia y durabilidad a los billetes.
Los billetes tienen varios elementos de seguridad para evitar que sean falsificados. Algunos de estos elementos pueden ser detectados por medio de los sentidos, como el tacto o la vista, otros requieren máquinas especiales.
Los elementos de seguridad de los billetes de papel son los siguientes:
1. CAMBIO DE COLOR (OVI). El numeral de la denominación está impreso con una tinta que cambia de color dependiendo de la inclinación en la que se observa.
2. MARCA DE AGUA. Imagen que corresponde al personaje del billete y que sólo es visible al observar el billete a contraluz.
3. IMPRESIÓN CON REALCE. Relieve en el anverso del billete que es perceptible al tacto, se encuentra principalmente sobre los números que indican la denominación y el texto “BANCO DE MEXICO”.
4. TEXTURA DEL PAPEL. El papel de algodón en el que se imprimen los billetes tiene una sensación al tacto diferente a la de un papel convencional.
5. HILOS DE SEGURIDAD. Bandas de 1 mm de ancho que atraviesan el billete verticalmente. Estos hilos se encuentran dentro del papel y se aprecian al observar el billete a trasluz. En uno de los hilos se encuentra impresa la denominación correspondiente en letra.
6. BANDA IRIDISCENTE. Impresión con una tinta iridiscente que atraviesa el billete verticalmente, cuyo brillo depende de la inclinación en la que se observe y en la cual se aprecia el número de la denominación.
7. REGISTRO PERFECTO. Impresiones incompletas de ambos lados del billete que al observarse a trasluz se complementan para formar el número correspondiente a la denominación del billete.
Los elementos de seguridad adicionales en los billetes de polímero son:
1. VENTANA. Área transparente del billete con un contorno blanco. En ella se encuentra grabado con relieve el número 20.
2. TEXTURA DEL SUBSTRATO. Sensación al tacto del polímero en el que se imprimen los billetes.
Todavía es común ver que los bancos se llenen algunos días con personas que quieren cobrar o depositar cheques, cobrar su nómina, o pagar sus créditos o servicios.
Sin embargo, cada vez más personas reciben el pago de nómina a través de una transferencia electrónica y cada vez son más quienes han adoptado los medios de pago electrónicos para llevar a cabo sus transacciones.
La tarjeta de débito ha facilitado este proceso, ya que se utiliza para pagar en comercios afiliados con terminales punto de venta o por Internet, o simplemente para disponer de dinero en efectivo en cajeros automáticos.
En México la infraestructura para utilizar los medios de pago electrónicos ha crecido y mejorado en los últimos años.
De nada serviría tener una tarjeta bancaria si no hubiera redes electrónicas seguras para procesar los pagos entre los tarjetahabientes, comercios afiliados y los bancos.
Sin embargo, el efectivo sigue siendo, por mucho, el principal medio de pago.
Algunos de los factores que frenan la expansión de los medios de pago electrónicos en nuestro país, son:
• Un gran porcentaje de la población aún no tiene una cuenta en el banco y, sin ella, no pueden acceder a una tarjeta bancaria u otros medios de pago electrónico.
• Hay comercios que aún no se afilian con algún banco para aceptar pagos con tarjetas bancarias u otros medios de pago electrónicos.
• No se ha difundido información entre el público sobre el correcto uso de las tarjetas de crédito y de débito, tarjetas prepagadas, transferencias electrónicas de fondos y domiciliaciones. La falta de información ha generado desconfianza o malos hábitos de uso de estos medios de pago.
Existen instituciones que regulan las operaciones con medios de pago electrónicas:
El Banco de México tiene la responsabilidad de propiciar que los sistemas de pagos del país funcionen adecuadamente. Para ello vigila que sean seguros, además promueve:
• La oferta por parte de las instituciones de crédito de servicios financieros y de pagos a precios razonables
• La transparencia en las comisiones.
• La participación de nuevas instituciones financieras en la oferta de tales servicios.
La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) está a cargo de vigilar que los contratos y los estados de cuenta que los bancos proporcionen a sus clientes sean claros y justos.
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF) informa sobre el uso de los medios de pago electrónicos y asesora, protege y defiende los derechos de las personas que utilizan servicios de las instituciones financieras.
Cada vez más transacciones en el mundo se hacen con dinero electrónico y menos con dinero en efectivo.
La disponibilidad de sistemas de pagos electrónicos puede cambiar ciertos hábitos de compra y almacenamiento de dinero de las personas y las empresas y, a nivel de la economía en su conjunto, reduce los costos de efectuar transacciones y amplía las posibilidades de comerciar.
Con los sistemas de pago electrónicos se pueden comprar bienes y servicios en cualquier parte de mundo sin tener que pisar un banco o una casa de cambio.
Un medio de pago electrónico permite a los consumidores comprar bienes y servicios en establecimientos, aun cuando no traigan billetes y monedas en la bolsa; o sin presentarse en los establecimientos, al realizar compras por Internet o por teléfono.
Esto aumenta el número de posibles vendedores a los que cada consumidor puede acudir y el número de compradores al que cada negocio puede vender. Esto puede mejorar la competencia en los mercados.
Además, algunos medios electrónicos permiten dar acceso al sistema financiero a personas que viven en comunidades pequeñas o remotas. Así se facilita que se realicen más transacciones.
Todo esto promueve que las economías crezcan más.
Con estos medios también es más fácil para los gobiernos reducir la corrupción, ya que se facilita el control de las entregas de dinero por programas sociales, del cobro de servicios y de la recaudación de impuestos.
Sin embargo, las diferencias socioeconómicas, de educación y de acceso a nuevas tecnologías entre la población han limitado el acceso a estos medios de pago.
3 comentarios:
Necesitaba saber los aspectos legales, no la historia del sistema monetario... pffff!
necesito saber el comportamiento del sistema monetario en Mexico
variaciones en el tipo de cambio en los ultimos 56 anos donde busco si alguien me puede ayudar envieeme un correo a david.guzman@grupocsi.com
gracias +-+
debe de hablar del sistema monetario en mexico el cual es el sistema de tasa ajustabl que opera en mexico desde 1195- hasta el dia de hoy¡¡¡
BYE...
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